CIERRO MI PUERTA

Voy a cerrar la puerta firmemente
lo digo ante mi honor como testigo
ya no se abrirá mas, sólo un postigo
para mirar a quien tocar intente.
Hoy yo sostengo mi mirar de frente
sin ver siquiera el poderoso hastío,
mi mundo no es retórico y sombrío
está lleno de amor y con certeza
arranca la más mínima maleza
que quiera desafiarme al desvarío.

Cierro con llave y el umbral vacío
de tanto desamor se vuelve claro
jamás siento temor ni desamparo
porque vivo con Dios en su albedrío.
Siento pena de ver que un ser impío
trato de lastimar, lo lastimado
mas que pena y dolor se ha castigado
Porque los hombres, hombres, blasfeman
los hombres de verdad callados reman
por un río de dignidad sagrado.

Por eso ya mi puerta yo he cerrado
con llavín y pestillo para aquellos
que hieren con palabras y atropellos
a un corazón que siempre se ha entregado
no guardo ni rencor, ni algún enfado
pues he limpiado con perdón mi lecho
sólo pretendo defender mi techo
ese lugar de paz donde hoy aguardo
y dejo a Dios al cínico bastardo
que clave una saeta aquí en mi pecho

Mi puerta se cerro, y un crucifijo
protege mi morada de quimera
para que pueda resistir la espera
de llegar al lugar que sola elijo.
Como meta me trazo un rumbo fijo
dejando atrás los buenos y los santos
las victimas por Dios con sus encantos
y yo la pecadora se retira
para dejarlos en la gran mentira
escuchando sus penas y sus llantos.

Me voy en paz, alegre, con mi canto
con mis poemas y mis oraciones
con mis defectos, con desilusiones
y mi maleta donde cabe tanto.
De lo que dejo atrás solo me espanto
pues me cuestiono tanto del humano
ese que ya no extiende ni la mano
de corazón sin interés mezquino
pues quien reclama al dar en su camino
se queda solo en medio de un pantano.

Abro el postigo y agito mi mano
con gestos de sinceros regocijos
a mis padres, amigos y a mis hijos
a mi sobrina y a mi buen hermano.
Me despido en mi verso del cubano
que seguirá su lucha aun incierta
hoy me despido viva ,nunca muerta
pues la muerte es el paso hacia la vida
por ello yo me marcho convencida
de que tan solo cerraré mi puerta.